El PP ha exigido al consejero de Interior, Rodolfo Ares, que impida el acto político convocado por "los amigos de ETA" mañana en Bilbao y ha advertido de que la sustitución de la marcha por un acto político de la izquierda abertzale es "un nuevo subterfugio de Batasuna para intentar eludir su situación de ilegalidad".

En un comunicado, el parlamentario 'popular' Carlos Urquijo ha considerado que "no es de recibo que cuando llevamos más de un año ya aplicando con éxito la fórmula de tolerancia cero con quienes no respetan las reglas de juego democráticas, se de un paso atrás en esta política", y ha calificado la no prohibición del acto como "un error que será interpretado por ese mundo como un síntoma de debilidad".

Urquijo ha insistido en que para autorizar este acto "no es suficiente decir que no interferirá en el desarrollo de la fiestas", sino que es necesario tener en cuenta quién lo convoca, "que es el mundo de la izquierda radical, de Batasuna, de una formación ilegalizada que no puede convocar ningún acto político". "Está claro que ETA no sólo son sus comandos", ha criticado.

En este sentido, ha subrayado que es "imprescindible" trabajar siempre "contra la impunidad, y en fiestas con mayor motivo". "El mundo radical utiliza las fiestas para lograr un protagonismo que sólo pueden conseguir intentando reventar el ambiente festivo de la ciudad", ha subrayado.

Por eso, ha confiado en que la Ertzaintza "sea suficientemente diligente para terminar con esta burla de la ley en cuanto se escuche el primer grito de apoyo a ETA o aparezca el primer cartel o pancarta de apoyo a los terroristas".

Finalmente, ha recordado que "son las instituciones públicas, y en este caso el Gobierno vasco, quien debe impedir que el espacio público sea ocupado por aquellos que tratan no sólo de fastidiar las fiestas, sino que además utilizan estos actos para hacer apología del terrorismo".