Los actores Juan Antonio Quintana y Carlos Recio repasarán algunas de las obras de los poetas españoles más destacados de los últimos 500 años en el recital 'Amor y muerte en el camino', que podrá verse en la Sala Experimental del Teatro Zorrilla de Valladolid del 1 al 4 de mayo.

Bajo la dirección del propio Quintana, 'Amor y muerte en el camino' supone, en palabras del veterano actor, una "antología de sentimientos expresados a través del verso" que pretende reivindicar el teatro poético, pues éste "duplica o triplica su valor".

El público que asista al recital podrá escuchar sobre las tablas los poemas 'Esto es amor', de Lope de Vega; 'Definición de amor', de Francisco de Quevedo; 'Romance sonámbulo', 'La zapatera prodigiosa', 'San Gabriel', 'La casada infiel', 'Romance de la pena negra' y 'Llanto por Ignacio Sánchez Mejías', de Federico García Lorca; 'El Mágico Prodigioso', de Calderón de la Barca; 'Sobre la muerte' y 'Octubre', de Juan Ramón Jiménez; 'Si el hombre pudiera decir...', de Luis Cernuda; 'Elegía a Ramón Sijé' y 'Nanas de la cebolla', de Miguel Hernández, y 'Llama de amor viva' y 'Noche oscura', de San Juan de la Cruz.

La obra podrá verse los días 1, 2 y 3 a las 20.30 horas, mientras que el domingo 4 la representación tendrá lugar a las 19.00.

En declaraciones recogidas por Europa Press, Juan Antonio Quintana ha animado al público vallisoletano a acudir y ha augurado que "saldrá del teatro embrujado por el verso". Asimismo, ha reivindicado el teatro en verso y ha tildado de "estupidez" que este tipo de arte dramático "no tenga que notarse que es verso", sino que "hay que decirlo con naturalidad", a fin de que "parezca que los actores se expresan así comúnmente y no suene a ripio".

Por su parte, Carlos Recio ha reconocido la dificultad de interpretar la poesía frente a un texto en prosa, ya que la primera requiere "estudio y control", al tiempo que ha recalcado que "no se trata del típico recital frente a un atril".

Amor y muerte

El nexo común de los poemas elegidos son "el amor y la muerte", pero con un criterio de "amenidad", según ha subrayado Quintana, el cual se ha confesado "harto de oír que la poesía es un rollo".

En este sentido, el gerente del Teatro Zorrilla, Enrique Cornejo, ha destacado el componente que el propio escenario de la Sala Experimental aporta, ya que en ella "el espectador siente muy de cerca al actor", lo que supone "un reto" para el actor, el cual "tiene que actuar en un primer plano muy real".

Por último, Cornejo ha ensalzado la figura del Juan Antonio Quintana, y ha sentenciado que Valladolid "tiene una deuda con él", por lo que ha hecho un llamamiento a la asistencia.