La Agencia de Vivienda de Catalunya ha comunicado este lunes que cinco de las familias que residen en el bloque de Salt (Girona) ocupado por la PAH, a quienes se les ha adjudicado una vivienda de protección, todavía no han aceptado los pisos sociales ni han firmado los contratos de alquiler.

En un comunicado, la Generalitat ha explicado que desde el 28 de octubre están preparadas las resoluciones para adjudicar los inmuebles, a través de la Mesa de Emergencias, y que el 11 de noviembre se realizó una visita a estas viviendas para mostrarlas a los futuros arrendatarios.

La Agencia de Vivienda ofrece un contrato de alquiler para un periodo de dos años —prorrogable hasta cuatro— para los pisos, con unas mensualidades que no superan los 50 euros, con el objetivo de que los residentes del bloque de Salt acepten los inmuebles adjudicados.

En total fueron seis las familias que presentaron una petición formal a la Generalitat para obtener un piso de protección, aunque se descartó un caso a la espera de que aporte más documentación para poder valorar si cumple los requisitos necesarios.

Las familias manifestaron en reiteradas ocasiones que preferían esperar un pronunciamiento de Estrasburgo antes de aceptar los inmuebles ofrecidos por la Agencia de Vivienda, pero el tribunal europeo ya levantó a principios de mes la medida cautelar que paralizaba el desalojo del bloque de Salt.

Asimismo, el juzgado de instrucción número 3 de Girona ha fijado para este miércoles el desalojo del edificio, propiedad de la Sareb, aunque desde la PAH han avanzado que opondrán resistencia y que las 14 familias que residen en el bloque —19 adultos y 17 niños— dormirán delante de la sede de la Generalitat en Girona si los expulsan del inmueble.