La junta general de accionistas de Ence-Energía y Celulosa celebrada este jueves ha aprobado el reparto de un dividendo de 0,07 euros brutos por acción, así como una retribución complementaria de 1 acción por cada 25 acciones en circulación.

Este reparto supone "una atractiva retribución para el accionista, siguiendo la línea iniciada el año anterior, en el que Ence alcanzó una rentabilidad para el accionista del 14%", aseguró el presidente de la compañía, Juan Luis Arregui.

Ence indica que esta rentabilidad ha permitido que la empresa haya sido seleccionada para formar parte del Ibex Top Dividendo, tras un ejercicio 2012 en el que el resultado de la compañía ascendió a 43 millones de euros.

La consolidación de las ventas de celulosa y el buen comportamiento operativo de la empresa, unido al aumento de los ingresos del negocio de energía y la mejora de costes lograda en el ejercicio, han permitido la obtención de este beneficio, un 4% superior al de 2011.

Arregui también ha criticado los últimos cambios regulatorios en el sector de las renovables, que reducen "de forma inesperada" la retribución de la generación con biomasa.

Arregui pidió que el Gobierno no deje pasar la oportunidad de creación de empleo que la biomasa supone para España y que se levante la moratoria a la generación de energía a partir de esta fuente, para la que hay planificados 730 megavatios (MW) como parte del Plan de Energías Renovables (PER).

En este sentido, el consejero delegado de Ence, Ignacio Colmenares, afirmó que "la construcción de los 736 MW pendientes del PER supondría la creación de más de 13.500 nuevos empleos, fundamentalmente rurales, así como unos ingresos y ahorros superiores a los 670 millones de euros anuales para las administraciones públicas."

Estos ahorros, indicó el directivo, contrastan con unos costes máximos de 530 millones de euros anuales, "lo que refleja una balanza económica claramente positiva para el Estado."

Plan de competitividad laboral.

Por otro lado, el directivo anunció el acuerdo con los comités de empresa para negociar un "ambicioso" Plan de Competitividad Laboral que permita reducir los excedentes de plantilla existentes, así como reducir y flexibilizar los costes salariales para hacer frente a las medidas energéticas del Gobierno y mantener la capacidad de competir de Ence en el mercado internacional de la celulosa.

"Este plan nos dará flexibilidad de los costes salariales a través de su vinculación a la productividad y los resultados, y no al IPC como establecen hasta el momento los actuales convenios colectivos en vigor en Ence", señaló.

Además, el plan "también pretende una fuerte moderación salarial durante los próximos años, así como un aumento de la jornada anual, lo que nos permitiría profundizar en nuestra competitividad y eficiencia, añadió.