La consejera de Educación de la Junta de Andalucía, Mar Moreno, ha subrayado que la adjudicación provisional a una nueva empresa del servicio de comedor escolar cuyo contrato ostentaba la empresa Brassica Group, inmersa en un conflicto laboral que deriva en un perjuicio para alumnos y familias al haber iniciado sus trabajadores huelga por los impagos de nóminas —lo que ha desembocado en la resolución de contrato por parte de la administración andaluza—, "no debe ir más allá de una semana".

En rueda de prensa, Moreno ha reivindicado la "contundencia" y "celeridad" con la que ha actuado en este asunto la Junta, "poniendo por delante de todo los derechos de los niños y los trabajadores". Por ello, y aunque la situación causará en los próximos días "molestias inevitables", la titular autonómica de Educación se ha congratulado de que el asunto se haya encauzado.

Al respecto, la consejera ha vuelto a incidir en que, a pesar de que el contexto de crisis redunda en un mayor retraso en los pagos por parte de la administración, la Junta ha realizado sus abonos pendientes, recordando que de 40 empresas con las que la Junta trabaja en este servicio únicamente se han registrado incidencias de gravedad en el caso de Brassica Group.

A día de hoy, las movilizaciones afectan a 6.400 alumnos de Cádiz —la provincia con una mayor incidencia, con 4.500—, Huelva y Sevilla, donde se ubican los comedores de Brassica —a la que Moreno reconoce el derecho de iniciar las acciones que crea convenientes, tal y como ha llevado a cabo la propia Consejería— en los que la convocatoria de huelga está vigente.

Los trabajadores, ha añadido Moreno, serán subrogados por parte de la empresa que asuma la gestión definitiva de este servicio tras la adjudicación provisional. En este sentido, los empleados han valorado "muy positivamente" la iniciativa de la Junta de proceder a la resolución del contrato con el grupo, al tiempo que han pedido que se garanticen los cobros de los atrasos salariales.

Situación "insostenible" de los trabajadores

Una de las delegadas de personal de Brassica, Isabel Contreras (UGT), explicó a Europa Press que los empleados no hacen sino "ejercer nuestro derecho" y que, en este sentido, la Consejería es "la primera interesada en dar este servicio".

"No hay que olvidar que los principales afectados son niños, y que se deja a muchos padres en la situación de tener que enfrentarse a pedir permisos en sus puestos de trabajo o tener que contar con la ayuda de familiares o vecinos", ha expuesto Contreras.

La delegada de personal ha manifestado que los empleados llevan tres meses sin cobrar su sueldo y que si han pospuesto la decisión hasta estos momentos ha sido por "pensar en los más indefensos", ya que "sabíamos que si nos poníamos en huelga haríamos mucho daño". Sin embargo, ha agregado, la situación era ya "insostenible".