Cantabria es la comunidad que más ha reducido el número de parados extranjeros en el último año, un 14,8% (ochocientos menos), mientras que a nivel nacional han aumentado un 2,4%. Además, es la tercera región que crea empleo extranjero a mayor ritmo en el último año, el 1,8%, cuando la media nacional registra una destrucción del -6,8%, según un informe de la patronal de grandes empresas de trabajo temporal (Agett).

La creación de empleo extranjero en Cantabria se debe principalmente a las mujeres, con 300 ocupadas más, mientras que los hombres se mantienen igual respecto al tercer trimestre de 2011.

Igualmente, Cantabria tiene la menor tasa de paro en el colectivo de extranjeros, un 21,9 por ciento, que está 12,9 puntos por debajo de la media del país.

En la región hay actualmente un total de 4.600 parados extranjeros (2.800 hombres y 1.800), que representan el 10,6 por ciento del total, el menor porcentaje por comunidades y 10,1 puntos por debajo de la media nacional.

Desde que comenzó la crisis en el tercer trimestre de 2007 hay un total de 2.700 parados extranjeros más (142,1%), es decir, se ha más que duplicado su número. Además, se han perdido 1.200 empleos extranjeros (-6,7%).

Datos nacionales

Desde que arrancó la crisis, se han destruido 635.000 empleos ocupados por extranjeros, y País Vasco, Extremadura y Asturias son las comunidades que lo han hecho a un mayor ritmo durante el último año.

De hecho, el número de extranjeros en paro se ha triplicado desde el tercer trimestre de 2007, cuando estalló la crisis, hasta el tercer trimestre de 2012, al pasar en este periodo de 380.000 desempleados a un total de 1.182.400.

Así, la tasa de paro de la población extranjera se ha multiplicado por más de tres en este periodo, desde el 11,8% del tercer trimestre de 2007 al 34,8% del tercer trimestre de este año, lo que significa que uno de cada tres extranjeros que quieren y pueden trabajar está en paro.

En esos cinco años, la cifra total de parados en España ha crecido en casi cuatro millones de personas, de los que 802.400 son extranjeros, es decir, el 20,1% del total. En conclusión, uno de cada cinco parados que se han generado en España durante la crisis es extranjero.

Agett subraya que el peor año de la crisis para este colectivo fue 2009, igual que ocurrió en el conjunto de España. De hecho, el número de inmigrantes en paro superaron por primera vez el millón de parados durante el primer trimestre de 2009.

El perfil del parado extranjero se corresponde con el de un varón, de entre 25 y 44 años, cuya máxima formación es la secundaria. En este sentido, la patronal de grandes ETT señala que la tasa de paro es menor cuanto mayor es la formación, y viceversa.

Así, la tasa de paro de los extranjeros analfabetos alcanza el 57,6%, mientras que para los que tienen educación primaria es del 43,5%. Los que tienen educación secundaria se mueven en valores superiores al 30%; los de educación superior están en un 26%, y los extranjeros con doctorado presentan una tasa de desempleo del 15%.

Desde un punto de vista regional, las comunidades con más paro entre los extranjeros están encabezadas por La Rioja y Murcia, con tasas del 34,6% y del 31,2%, respectivamente, seguidas de Madrid (29,4%) y Cataluña (27,4%).

Sin embargo, en otras regiones, como Extremadura, Galicia y Cantabria, el colectivo de extranjeros apenas llega a representar a uno de cada desempleados, debido probablemente a la "escasa incidencia" de la inmigración en estas comunidades, según Agett.

Otros datos

Agett también analiza en este informe otros datos relevantes del tercer trimestre del año, como el hecho de que el ritmo interanual de destrucción de empleo público (-7,1%) haya superado al del sector privado (-6%) por las medidas de recorte de gasto que están adoptando las comunidades.

Sólo tres regiones crearon empleo público en términos interanuales durante el tercer trimestre: La Rioja (2.100 efectivos), Asturias (6.400 empleados) y País Vasco (7.800). Por el contrario, todas las regiones destruyeron empleo privado, salvo Aragón, que generó 3.900 puestos de trabajo.

En el caso de Cantabria, un 8,6% de hogares tienen a todos sus miembros activos en paro, muy por debajo de la media nacional (13,4%).

En la región se destruye tanto empleo público (-5,9%, equivalente a 2.600 empleos) como privado (-4,5% y 7.200) de forma interanual.

Los parados cántabros que llevan más de un año en esta situación representan el 52,6% del total de parado, ligeramente por encima de la media nacional (52,5% de parados de larga duración).