La estación de ADIF de Córdoba Central acoge del 7 al 27 de junio una exposición fotográfica que conmemora el XX Aniversario de la Alta Velocidad Española (AVE), procedente de las estaciones de Madrid Puerta de Atocha y Ciudad Real, y que posteriormente la muestra viaja a Sevilla Santa Justa.

Según informa ADIF en una nota, la exposición se compone de seis paneles con fotografías y textos informativos que invitan al visitante a realizar un pequeño recorrido por la historia de la Alta Velocidad ferroviaria en España; desde sus inicios, hace ya 20 años, pasando por la situación actual y sin perder de vista el futuro.

La primera Línea de Alta Velocidad Española, Madrid-Sevilla, se puso en servicio el 21 de abril de 1992, coincidiendo con la inauguración de la Exposición Universal en la capital hispalense. De esta forma, el tiempo de viaje en tren entre ambas ciudades se reducía desde más de siete horas a menos de tres.

Antes de 1992, en torno a 400.000 viajeros al año utilizaban el tren para viajar entre Madrid y Sevilla. Hoy, el ferrocarril se ha hecho con el 85 por ciento de la cuota de mercado frente al avión, lo que significa que casi tres millones de personas optan por el tren de alta velocidad para realizar este recorrido.

Después de 20 años de su estreno, cada día circulan en España más de 300 trenes de Alta Velocidad que dan servicio a casi 100.000 viajeros diarios y llegan a 30 ciudades de forma directa, extendiendo sus ventajas a otros 50 municipios españoles. Además, la Alta Velocidad es sin duda el sistema de transporte más sostenible que existe por su contribución al ahorro de emisiones de gases de efecto invernadero.

Durante el año 2011, la estación de ferrocarril de Córdoba Central registró un total de 3.286.417 usuarios, lo que supone un incremento del 1,8 por ciento en el número de clientes que pasaron por dicha estación respecto a 2010.

Motor de desarrollo

El sistema de Alta Velocidad Española, desarrollado gracias al esfuerzo conjunto de todos los españoles y del que la línea Madrid- Sevilla fue la primera piedra, ha proporcionado a los ciudadanos numerosos beneficios, como son unos tiempos de viaje muy competitivos, la conexión entre el centro de las principales ciudades y mejoras en términos de seguridad, fiabilidad y confort, del que ha resultado beneficiaria una mayoría de la población, constituyéndose en un modo de transporte exportable y en expansión, y uno de los motores de desarrollo socioeconómico del país.

Desde su puesta en marcha, el programa de Alta Velocidad ha contado con una inversión aproximada de 39.500 millones de euros, que ha convertido al sector ferroviario en uno de los principales activos del sistema económico español.

De este modo, el 21 de abril de 1992, con la puesta en servicio de la Línea de Alta Velocidad Madrid-Sevilla se inauguró un modelo de negocio y un nuevo paradigma de movilidad. Las relaciones Madrid- Málaga y Madrid-Valladolid entraron en servicio en diciembre de 2007. Unos meses más tarde, en febrero de 2008, se pondría en marcha la línea Madrid-Zaragoza-Barcelona. Las incorporaciones más recientes han sido entre Madrid y Albacete/Valencia en diciembre de 2010, y el tramo de Alta Velocidad gallego Santiago-Ourense-A Coruña, en diciembre de 2011.