El alemán Nico Rosberg (Mercedes) ocupará el domingo el primer puesto de la formación de salida en el Gran Premio de Baréin, tercera prueba del Mundial de Fórmula 1, que se disputa en el circuito de Sakhir en la que el español Fernando Alonso (Ferrari) comenzará desde la novena plaza. El asturiano fue décimo y último en la Q3, pero la sanción que arrastra Daniel Ricciardo le hace subir un puesto.

Será la primera vez que ambos bólidos plateados, los dos grandes dominadores del campeonato, copen la primera fila esta campaña. Este domingo en el circuito de Sakhir, que estrenó una curva en honor de Michael Schumacher, habrá siete coches propulsados por motores Mercedes entre los ocho primeros de la parrilla.

Nico Rosberg, que lidera el campeonato con 18 puntos de margen sobre Hamilton y 19 de ventaja sobre Fernando Alonso, no estaba en la 'pole' de un gran premio desde el de Mónaco del año pasado, en el que acabó llevándose el triunfo. Este sábado se la arrebató al que parecía máximo candidato a ella, su compañero de equipo Lewis Hamilton.

El propio Ricciardo fue tercero, pero por la citada sanción saldrá desde la decimotercera plaza.

Tras los Mercedes saldrán los sorprendentes Valtteri Bottas (Williams) y Sergio 'Checo' Pérez (Force India). La tercera línea de la parrilla la forman Kimi Raikkonen (Ferrari) y Jenson Button (McLaren) y, finalmente, por delante de Alonso estarán Felipe Massa (Williams) y Kevin Magnussen (McLaren).

Fernando Alonso tendrá por detrás a contrincantes difíciles: Sebastian Vettel (Red Bull), que no entró en la Q3, Nico Hulkenberg (Force India), Daniil Kvyat (Toro Rosso) y el sancionado Ricciardo (Red Bull).

El venezolano Pastor Maldonado (Lotus-Renault) y el alemán Adrian Sutil (Sauber-Ferrari) quedaron eliminados en la primera ronda (Q1), al igual que los dos pilotos de Caterham-Renault y los dos de Marussia-Ferrari.

Las fuerzas de seguridad se enfrentaron este sábado a manifestantes opositores al régimen y a la Fórmula 1 en Baréin, en unos disturbios que se limitaron a algunas zonas del país.

Esos altercados se vieron en la aldea de Karanah, al norte de la capital, Manama, donde la policía lanzó gases lacrimógenos, mientras que en otras zonas persiguieron a los manifestantes antes de que comenzaran a protestar.

Los agentes reforzaron hoy su despliegue en las principales vías, coincidiendo con la sesión de clasificación para el Gran Premio de Baréin, tercera prueba del Mundial de Fórmula 1, que se disputa en el circuito de Sakhir.

El viernes, miles de personas salieron a las calles de Baréin para pedir reformas políticas y el fin de la Fórmula 1 por llevarse a cabo a pesar de la represión.

Grupos radicales han amenazado recientemente con perpetrar ataques durante el Gran Premio en Manama, que terminará el domingo, en el marco de las protestas de los opositores contra esa competición.

Ante esas amenazas, las autoridades bareiníes han reforzado las medidas de seguridad, incluso en el interior del circuito.