El Diputado del Común de Canarias, Manuel Alcaide, no sólo no ha desechado su recomendación de que los funcionarios tengan que ir uniformados, sino que además ha querido dejar claro que tienen que ir a trabajar "adecuadamente vestidos".

Así lo ha planteado en una entrevista concedida a 'Cope La Palma' recogida por Europa Press, donde ha vuelto a salir a la palestra una de las polémicas que han rodeado a la figura de Manuel Alcaide, quien propuso en el transcurro de una comisión parlamentaria la posibilidad de que los funcionarios que ejercen su labor en las administraciones canarias pudiesen vestir uniforme para "saber si salen a la calle o no, o si están tomando café".

El Diputado del Común ha aclarado que este tema "aún está pendiente" porque "hay quien dice que prefiere ir uniformado porque supondría un ahorro y otros que dicen que de ninguna manera".

Ahora bien, donde sí ha hecho hincapié es en que las personas que integran los servicios públicos "tienen que ir adecuadamente vestidos", es decir, "no pueden estar haciendo este servicio con un desequilibrio en la vestimenta". "Hay que ir limpio, ordenado y correctamente cuando se está desarrollando un servicio público", insistió.

En su opinión, esto no se está cumpliendo y para poder comprobarlo invitó a quien quiera a visitar "cualquiera de las consejerías del Gobierno de Canarias para que vean cómo le reciben", así como en los taxis y en las guaguas porque "se están perdiendo las formas en el tratamiento del vestir". De hecho, ha apuntado que el problema de la vestimenta ya se ha planteado en algunas ciudades como Barcelona, dado que "hay quien quiere pasear cerca de las avenidas de la playa sin camisa", y también está el tema del desnudismo en las playas. "Todos éstos son derechos que habrá que resolver y determinar cómo podemos ir y cómo no", remarcó.

Es más, Manuel Alcaide ha querido recordar que cuando ejercía la carrera judicial, los jueces llevaban la toga sobre traje negro. "Si eso era así, ¿qué perjuicio hay en que se siga usando el sistema y por qué se ofenden los demás funcionarios cuando se les dice que vayan uniformados a su trabajo?", se preguntó.

Pero en definitiva, uniformes al margen, lo que más preocupa al Diputado del Común, tal y como aclaró, es que el funcionario "se entregue a su trabajo, desarrolle con capacidad el mismo y preste la debida atención al ciudadano".