El abuelo. Paco Ortiz es uno de los personajes que han sido retratados en el libro Cincuenta por Vallecas. Esta publicación, editada por el Ayuntamiento de Madrid, pretende rendir homenaje a algunos de los personajes más destacados del popular barrio de la capital. Paco es el director del centro de Mayores Santa Eugenia y ha vivido en el barrio durante mucho tiempo: "Hace sesenta años, Villa de Vallecas estaba rodeado de eras, en las que se trillaba la mies del trigo y cebada. Todos los vecinos se conocían. Recuerdo los encierros y novilladas en plazas de talanquera".
Raúl CancioEl churrero. Antonio Martín Torremocha regenta una chocolatería que lleva sirviendo desayunos a tres generaciones de vallecanos. Su clientela, principalmente amas de casa y trabajadores, han llenado con sus conversaciones las paredes de este negocio familiar, que cuenta ya con 70 años.
Raúl CancioEl cura. Rufino García Antón es algo más que el párroco de San Eulogio. Llegó a Vallecas poco antes de la muerte de Franco, y desde entonces ha intentado crear un grupo de creyentes que sea "fiel al estilo de vida de las primeras comunidades cristianas", quienes ponían todo en común y, gracias a ello, nadie pasaba necesidad.
Raúl CancioEl deportista. A Alberto garcía una vez le llamaron el africano de Vallecas. El corredor de fondo valora las zonas verdes construídas en el barrio durante los últimos años, en especial el parque de Fontarrón. El deportista más internacional del barrio cuenta, en reconocimiento a su carrera, con un polideportivo que lleva su nombre.
Raúl CancioEl líder vecinal. Prisciliano Castro ha sido hasta hace poco el presidente de la Federación Regional de Asociaciones de Vecinos. Dice que en Vallecas es especialmente cierto el dicho de que "Madrid es un conjunto de gente ingeniosa que realiza bien el gran milabro de vivir".
Raúl CancioEl payaso. Miliki, el popular apodo de Emilio Aragón, es quizás uno de los vallecanos más famosos. "Los niños de mi calle éramos unos privilegiados. Teníamos campo abierto para jugar al fútbol y una fuente de agua fresca y cristalina. Los vecinos lograron convertir aquel pequeño barrio en la gran y admirada urbe que hoy representa".
Raúl CancioEl panadero. Constantino Martínez Souto tiene el honor de ser el propietario del comercio más antiguo de Villa de Vallecas. Su tahona abrió al público en el año 1902. Recuerda tiempos pasados: "antes, era corriente ver pasar el ganado por las calles, conducido por chavalillos, que también hacían pequeñas labores en el campo, como trillar en las eras".
Raúl CancioLa presidenta. Teresa Rivero es presidenta del principal club de fútbol del barrio, el Rayo Vallecano, desde el año 1994. Dice que la afición del equipo es como su familia, y para ella "es un orgullo" que el club esté nutrido "de los niños del barrio, que en un futuro serán los fieles representantes de la casta y el orgullo vallecano".
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