Lorna Jacklin, una neuropediatra que dirige la Clínica Teddy Bear para Niños con Abusos examina a una niña de dos años y medio. Al pedirle que se tendiese, la pequeña abrió las piernas como le había enseñado su atacante
© Mariella Furrer / mypieceofsky.comUna niña intenta irse de la consulta de un forense. Un niño de nueve años de la familia admitió más tarde que practicaba "juegos sexuales" con ella. Ambos niños eran víctimas de abusos sexuales
© Mariella Furrer / mypieceofsky.comUna niña consuela a otra que fue atacada sexualmente por una compañera durante una excursión escolar
© Mariella Furrer / mypieceofsky.comUna niña de 10 años habla con Tinka Labuschagne, una especialista del Ministerio de Educación sudafricano. El día antes la niña confesó a su profesora que era violada desde los seis años por su hermano mayor y dos amigos.
© Mariella Furrer / mypieceofsky.comChris es trasladado a la unidad de Protección Infantil de la Policía para declarar ante un trabajador social. Pese a lo que había dicho a los agentes, el niño se negó a confirmar la violación que había sufrido y los culpables nunca fueron juzgados
© Mariella Furrer / mypieceofsky.comEl inspector Stroppie Grobbelaar, especializado en delitos sexuales a niños, busca con su perro Fargu el cuerpo de Kamo, un niño desaparecido
© Mariella Furrer / mypieceofsky.comEscena del funeral de Sheldean Human, muerta tras un ataque sexual
© Mariella Furrer / mypieceofsky.comAmigos y familiares consuelan a Lebohang Mokoena, tía de Sibongile, una niña desaparecida en Kliptown
© Mariella Furrer / mypieceofsky.comSussana fue raptada por un culto satánico a los ocho años, sometida a violaciones en grupo y otros abusos. Ahora tiene 24 y sufre un trastorno mental agudo con el que ha desarrollado 200 personalidades distintas
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