Blacky, una labradora muy joven, abre una puerta. Un entrenamiento estándar para un perro así ronda entre los seis u ocho meses.
JORGE PARÍSUn bebé con diabetes juega con su glucómetro frente a Robin, el primer perro entrenado en España para detectar hipoglucemias.
JORGE PARÍSLos entrenadores de Robin introducen con cuidado para no contaminarla una gasa que contiene sudor, sangre y aliento de su futuro dueño con una titulación inferior a 60 miligramos de azúcar por decilitro de sangre en una bolsa de plástico que a su vez envuelven en una toalla y meten dentro de una caja.
JORGE PARÍSUn bebé de año y nueve meses con diabetes jugando con su glucómetro. El riesgo de hipoglucemias es mayor en los niños, ya que su cerebro se está formando y un correcto aporte de azúcar es imprescindible.
JORGE PARÍSHay tres cajas, alguna incluso con una comida apetitosa, Robin entra, las olfatea y en cuestión de segundos está ladrando frente a la caja con la muestra de hipoglucemia.
JORGE PARÍSTeo Marical, director de la Fundación Bocalán y maestro de entrenadores, junto a Melchor se gana la atención de un niño con autismo.
JORGE PARÍSEl anclaje es una técnica que evita las fugas del niño y evita accidentes viales, ya que el perro se detiene a un metro del bordillo.
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