Diego Forlán y Marcos Senna se estuvieron peleando en el último entrenamiento del Villarreal. Tras el entrenamiento se pidieron disculpas en una rueda de prensa provocada por el club, pero la verdad es que tuvieron que separarlos sus propios compañeros. No son amigos, eso quedó muy claro.
El delantero uruguayo y el centrocampista brasileño nacionalizado español se lanzaron varios golpes. Su calentón comenzó en uno de los partidillos. Senna le hizo a Forlán
dos fuertes entradas y éste le respondió con otra a la altura de la rodilla.
Senna le propinó un puñetazo y luego se enzarzaron durante un buen tiempo, hasta que varios miembros de la plantilla lograron separarlos. Ahora todo está zanjado."Fue una
calentura. Ya sabéis que esto suele darse en el mundo del fútbol. Hemos pasado página y estamos más tranquilos", aseguró Senna, quien subrayó que piensa que no "va a haber ninguna enemistad".
También habló Forlán: "Veníamos
picándonos uno y otro y al final hemos acabado así. Es una lástima, pero ha sido un calentón y ya está. Mañana hablaremos, cada uno seguirá
como siempre y no creo que vayamos a tener más problemas", comentó.
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