La última bala de Luxe

El técnico brasileño del Real Madrid fue ratificado en la junta de ayer, pero se la jugará el domingo en Anoeta.
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El Bernabéu está cansado de Vanderlei Luxemburgo, lo demostró el miércoles con una pitada monumental, pero tendrá que aguantarlo por lo menos tres días más. Hasta el partido del domingo en Anoeta, en el que una derrota, o incluso un empate, podría mandar al técnico brasileño de vuelta a Sao Paulo, donde ya le están esperando con los brazos abiertos en el Santos.
 
Aunque, ayer, Florentino Pérez ratificara a Luxemburgo en su junta directiva, es evidente que el presidente tomó buena nota del malestar de los socios y, antes de que la crispación le salpique a él, prescindirá del técnico si es necesario. La secretaría técnica del Madrid tantea el mercado, por si las moscas.
 
El banquillo quema
 
Desde que Florentino accedió a la presidencia , en julio de 2000, han ocupado el banquillo cinco técnicos. Luxemburgo tiene el mejor porcentaje de victorias (67%), pero su juego no ha convencido. El domingo se la jugará sin Raúl y con la duda de Ronaldo.
 
Los cinco hombres del presidente
 
Del Bosque: Cuando llegó Pérez ya era el téc-nico. Ganó 2 Champions, 2 Ligas, 1 Intercontinental y 1 Supercopa de Europa. Fue destituido en junio de 2003.
 
Queiroz: Estuvo un año. Ganó la Supercopa.
 
Camacho: Duró tres telediarios (partidos) antes de dimitir. No soportó la derrota en Champions ante el Leverkusen (3-0).
 
García Remón: Llegó como asistente de Camacho y ocupó el banquillo de manera provisional, pero se le quedó grande.
 
Luxemburgo: Tenía un buen currículum y se estrenó el pasado mes de enero con seis victorias en Liga consecutivas. Esta temporada no está sabiendo sacar provecho a su plantilla.
 
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