2005 ha sido rutinario en el mundo de la raqueta, ganaba Roger Federer o Rafa Nadal, y punto.
El primer tercio de temporada comenzó con Nadal avasallador. Sobre tierra batida no encontró rival y ni siquiera Federer pudo frenarle en la arcilla de Roland Garros. Barcelona, Bastad, Costa do Sauipe, Acapulco, Beijing, Montecarlo, Canadá, Madrid, Roma, Stuttgart y la guinda de Roland Garros cayeron de su lado. Balance final: 79 partidos ganados, 10 perdidos.
Federer no se quedó atrás. Nadie le ha podido discutir su número uno. Ha perdido cuatro partidos en todo el año y amenaza con imponer una tiranía en Wimbledon. Este año lo ganó arrasando a Roddick en la final y el norteamericano no pudo ser más elocuente: «Sólo se le puede ganar dándole un puñetazo».
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