Los aficionados del estadio olímpico volvieron a abuchear a Renaud Lavillenie, medalla de plata en salto de pértiga en los Juegos Olímpicos de Río 2016, después que se produjera este mal gesto de la afición brasileña sobre el francés durante el final de la competición, en la que disputaba la medalla de oro al brasileño Thiago Braz, actual campeón olímpico.

La imagen se volvió a repetir este martes y, en el momento en el que el francés era nombrado por la megafonía y serle entregada la presea de plata, el público volvió a abuchear al deportista galo e incluso el propio Thiago Braz pidió a la gente que no lo hiciera y que aplaudiera.

Lavillenie mostró su enfado el lunes al término de la competición y llegó a comparar, en declaraciones a France Televisions, los juegos de Río con los de la Alemania nazi: "En 1936 el público también estaba contra Jesse Owens. No hemos visto eso desde entonces". También añadió que la pértiga "no es fútbol. Es la primera vez que veo algo así en atletismo. Es el momento más grande de tu vida y... ahora tengo que esperar otros cuatro años para recuperar el título".

Aunque posteriormente reconoció que tal vez se había excedido en ese comentario, lo cierto es que considera que "no es una buena imagen para los Juegos. Yo no le he hecho nada a los brasileños. El atletismo no es lugar para eso. Es una vergüenza para Río".