El noveno título de Rafa Nadal en el Conde de Godó de Barcelona tendrá que esperar a tiempos mejores. El tenista balear se despidió del torneo en los octavos de final después de caer con el italiano Fabio Fognini por 6-4 y 7-6 (8-6) tras dos horas de partido. El de Sanremo, verdugo del manacorí en las semifinales del Abierto de Río de Janeiro, concretó en la Ciudad Condal su segunda victoria consecutiva sobre Nadal gracias a su efectivo primer servicio y a su mayor número de golpes ganadores.

Nadal cayó en los cuartos del año pasado del torneo barcelonés ante Nicolás Almagro, y en esta edición dice adiós una ronda antes al verse superado de nuevo por el italiano, que no desaprovechó las concesiones del español, que no sacó el máximo provecho a 14 opciones de 'break' ni a ir por delante con rotura en tres ocasiones en el segundo set, una de ellas con saque para forzar el tercer y definitivo parcial.

El exnúmero 1 del mundo nunca pareció estar cómodo sobre la arcilla de la Central del Real Club de Tenis de Barcelona ante el 30 de la ATP, acumuló hasta 30 errores no forzados y no encontró frescura ni con su servicio ni tampoco al resto. Llegaría, ya en el segundo set, a mandar por 1-3 y por 2-4, pero ahí apareció el mejor Fognini con dos roturas que enviaron la resolución del encunetro hasta el ‘tie-break’. Fognini, en la resolución, disfrutó de hasta tres bolas de partido antes de concretar su victoria.

En el otro gran partido de la jornada, el alicantino David Ferrer, tercer cabeza de serie del Conde de Godó, sudó más de lo esperado para derrotar el joven sueco Elias Ymer, por 6-3 y 6-4, y clasificarse para los cuartos de final del torneo. El alicantino arrancó muy sólido y, pese a la resistencia de Ymer, se adelantó 5-0 en el primer set. Sin embargo, su rival, de 19 años, encontró la recompensa a su tenis agresivo a partir de entonces.

El sueco, de origen etíope, gano tres juegos seguidos y, pese a perder el primer set por 6-3, siguió progresando en la segunda manga, cuando se adelantó por 4-0 para poner contra las cuerdas a Ferrer. Solo la experiencia del número ocho del ránking mundial, que empezó a sacar mejor y serenó su juego para agotar la paciencia de Ymer en cada intercambio le permitió reponerse del bache y evitar que el partido se fuera a un incierto tercer set. Ferrer encadenó seis juegos y cerró el duelo para avanzar hasta cuartos.