La que, por ahora, es la mayor polémica de la Copa América, la jugada entre el defensa chileno Gonzalo Jara y el delantero uruguayo Edinson Cavani, en la que el andino le mete el dedo en el culo al charrúa, sigue dando coletazos y enfrenta a ambas federaciones, mientras que Cavani se muestra indulgente, al contrario que el Mainz, club alemán donde milita Jara.

La Federación de Fútbol de Chile (ANFP) y la Asociación Uruguaya de Fútbol (AUF) enfilaron todas sus baterías para obtener de la Conmebol sanciones severas a los jugadores que participaron en los hechos del partido de cuartos de final de la Copa América jugado el miércoles en Santiago.

La AUF denunció al chileno ante la Unidad Disciplinaria de la Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol). La entidad ha acompañado su alegato con fotografías y vídeos, los mismos que dejaron en evidencia a Jara con su provocación a Cavani.

A continuación la ANFP, replicó con la noticia de que ha acusado ante la misma Unidad Disciplinaria a Cavani y a otros seis jugadores uruguayos: el capitán Diego Godín, Fernando Muslera, José María Giménez, Jorge Fucile, Álvaro González y Christian Stuani.

El jugador de la selección uruguaya de fútbol Edinson Cavani dijo que la acción de Jara "son cosas del fútbol" que se "interpretan de muchas maneras". "No es un momento como para ponerme a opinar ni empezar a hablar y a sacar conclusiones de esas cosas, yo creo que hay cosas importantes que tengo que pensar", aseveró el delantero.

En cambio, el Mainz, equipo de la Bundesliga alemana en el que milita Jara, ha mostrado su descontento por la actuación de su jugador. El director deportivo del club, Christian Heidel, dijo que "es algo que no toleramos", por lo que se plantean su venta.