¿Por qué?: El Madrid quiere que se repita el encuentro porque entiende que el colegiado Rodríguez Santiago cometió un «error técnico y no de apreciación» al validar el gol de Jarque, cuando un segundo antes había hecho sonar su silbato. «Pitó una falta sobre Sergio Ramos, por eso nos quedamos parados», clamó la plantilla blanca. «Señaló un penalti cometido por Ramos», decía el Espanyol. Los servicios jurídicos blancos presentarán como prueba varios vídeos del encuentro y las declaraciones de los jugadores del Espanyol, que reconocieron haber escuchado el silbato del árbitro.

 

«No triunfará»: La patata caliente –hirviente– pasará hoy a Competición, que deberá decidir sobre una cuestión sin precedentes. «El recurso no será tenido en cuenta, porque para ello el árbitro (abogado de profesión) tendría que retractarse, y eso no sucederá», señalaban fuentes del Comité, entrada la noche de ayer.

 

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¿Hace bien el Madrid en impugnar el partido?
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Existen precedentes de partidos impugnados en el fútbol europeo y mundial: se repitieron un Burdeos-Toulouse (temporada 92-93), un Bayern-Nuremberg (93-94) y está pendiente de repetirse un Uzbekistán-Bahrein. Sin embargo, en la temporada 97-98, un duelo entre Munich 1860 y Karlsruhe no fue repetido por el mismo motivo que el Real Madrid-Espanyol.