La figura del alero Kevin Durant surgió con más fuerza que nunca en el ataque de los Oklahoma City Thunder, mientras que el gran juego defensivo volvió a los Indiana Pacers y a ambos equipos consiguieron sendos triunfos a domicilio en el tercer partido de sus respectivas semifinales de la Conferencia Oeste y Este de la NBA.

Durant reivindicó su condición de Jugador Más Valioso (MVP) y líder encestador de la liga al aportar 36 puntos, ocho rebotes y seis asistencias que permitieron a los Thunder vencer 112-118 a Los Angeles Clippers, en el Staples Center, y recuperar la ventaja de campo (2-1) en la serie que disputan al mejor de siete.

Junto a Durant, el base Russell Westbrook lo apoyó con un doble-doble de 23 puntos, 13 asistencias y ocho rebotes, que lo dejaron como el jugador más completo de los Thunder.

Pero si Durant y Westbrook cumplieron con su labor de jugadores franquicia, el ala-pívot congoleño, nacionalizado español, Serge Ibaka, se convirtió en el factor sorpresa ganador al ser el más eficaz del ataque de los Thunder tras aportar 20 puntos. Ibaka jugó 29 minutos en los que anotó 9 de 10 tiros de campo, el único que falló fue un intento de triple, y acertó los dos lanzamientos que hizo desde la línea de personal.

El jugador internacional español capturó seis rebotes, incluidos cuatro defensivos, puso un tapón e hizo una gran labor en el marcaje al ala-pívot Blake Griffin, de los Clippers, aunque fuese el máximo encestador del equipo angelino al encestar 34 puntos.

Los Clippers, que habían ganado en Oklahoma City el primer partido de la eliminatoria, no pudieron evitar la segunda derrota consecutiva y perder la ventaja de campo, a pesar que el base Chris Paul aportó un doble-doble de 21 tantos, 16 asistencias y tres recuperaciones de balón.

El partido, que nunca tuvo a ningún equipo con una ventaja que llegase a los 10 puntos, se rompió a falta de 1:23 minuto para el final cuando Durant anotó la canasta del parcial (107-113) que fue decisiva.

El cuarto partido de la eliminatoria se jugará el próximo domingo en el mismo escenario del Staples Center.

La vuelta al mejor juego de equipo y defensivo de los Pacers quedó plasmado en el tercer partido ante los Wizards a los que ganaron a domicilio por paliza de 63-85 y los dejaron con la peor anotación de su historia en un partido de la fase final.

La victoria permitió a los Pacers recuperar la ventaja de campo (2-1) en la serie que juegan al mejor de siete partidos y el cuarto tendrá de nuevo como escenario al Verizon Center, de Washington, donde el domingo volverá a enfrentarse ambos equipos.

El alero Paul George volvió a ser el líder y jugador más completo de los Pacers al aportar 23 puntos (6-15, 2-4, 9-10), ocho rebotes, cuatro asistencias, tres recuperaciones de balón y puso un tapón.

El pívot jamaicano Roy Hibbert mantuvo su mejor toque de muñeca y logró 14 puntos tras anotar 6 de 9 tiros de campo y 2-4 desde la línea de personal, capturó cinco rebotes —todos defensivos— y puso tres tapones.

De nuevo el ala-pívot David West se encargó de anotar las canastas decisivos, dos consecutivas en la recta final del partido que impidieron el intento de remontada de los Wizards y llegó a los 12 tantos y repartió cuatro asistencias.

Aunque ninguno de los dos equipos tuvieron su mejor inspiración encestadora, especialmente los Wizards, que establecieron la peor anotación en un partido de la fase final, los Pacers llegaron al 42 (31-74) por ciento de acierto en los tiros de campo y al 47 (7-15), de triples, comparados al 33 (24-73) y 25 (4-16), respectivamente, de Washington, que al final fueron abucheados por sus seguidores.