Ah hacer balance del fantástico Gran Premio de España, disputado el domingo en Jerez, hay que fijarse inevitablemente en la figura del Rey Don Juan Carlos.

Independientemente de la emoción de las carreras en sus tres categorías, el punto de atracción -Chikilicuatres aparte- fue Su Majestad el Rey.

Don Juan Carlos se mostró encantado y disfrutó como un niño en el circuito de Jerez, donde se le vio bromeando en los boxes, que fue visitando uno por uno recorriendo así todo el pit-lane. Allí saludó cariñosamente a todos.

El principal punto de atención estaba en el duelo entre Pedrosa y Lorenzo en MotoGP. El Rey vivió la carrera desde el muro de Repsol Honda. Una vez acabada la carrera, consiguió lo que nadie había conseguido hasta la fecha: que Dani y Jorge se estrecharan la mano.

Una vez conseguida esa 'gesta', Don Juan Carlos subió al podio para felicitar a Pedrosa, Lorenzo y Rossi. Precisamente, a éste último le ddedicó unas palabras sinceras: "Valentino, tenías que haber dejado pasar a Lorenzo".

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