El veterano alero alemán Dirk Nowitzki se convirtió en pieza clave que permitió a los Mavericks de Dallas vencer a domicilio por 93-87 a los devaluados Timberwolves de Minnesota.

Nowitzki jugó uno de los partidos más completos en lo que va de temporada al aportar 29 puntos, siete rebotes --seis defensivos--, dio una asistencia y recuperó un balón en los 32 minutos que disputó.

El alero alemán protagonizó jugada de tres puntos en la recta final del partido que sería decisiva al igual que la recuperación de balón que logró en los últimos segundos del tiempo reglamentario que aseguraron la victoria de los Mavericks (22-16), la séptima en los últimos 10 partidos disputados.

El pívot georgiano Zaza Pachulia volvió a ser también importante en el juego interior de los Mavericks al aportar un doble-doble de 13 puntos, 11 rebotes, dos asistencias y puso un tapón.

Mientras que el alero Chandler Parsons llegó a los 14 tantos que lo dejaron como el segundo máximo encestador del equipo y fue el tercer jugador de los Mavericks que logró números de dos dígitos.

El base reserva puertorriqueño José Juan Barea se convirtió en el sexto jugador de los Mavericks al conseguir ocho puntos en los 17 minutos que estuvo en la pista del Target Center, de Minneapolis.

Barea anotó 4 de 7 tiros de campo, falló dos intentos de triple, dio cuatro asistencias, capturó un rebote y perdió dos balones, mientras que el ala-pívot dominicano Charlie Villanueva no jugó por decisión del entrenador de los Mavericks Rick Carlisle.

Nowitzki, de 37 años, surgió en el momento que más lo necesitaba su equipo y anotó cuatro de los seis triples que consiguió el equipo de Dallas.

El alero canadiense Andrew Wiggins se alzó como el líder el ataque de los Timberwolves con 21 puntos, siete rebotes, tres asistencias y dos recuperaciones de balón, que lo dejaron al frente de una lista de cuatro jugadores que tuvieron números de dos dígitos.

Entre ellos estuvo el base español Ricky Rubio que jugó 34 minutos y aportó 12 puntos, ocho rebotes y siete asistencias, que no impidieron la sexta derrota consecutiva de los Timberwolves y la décima en los últimos 11 partidos disputados.

Rubio anotó 4 de 10 tiros de campo, falló los dos intentos de triples, y acertó 4-5 desde la línea de personal, sin que haya podido mantener una consistencia en su juego ofensivo.

El internacional español capturó seis rebotes defensivos, recuperó tres balones, perdió dos y cometió dos faltas personales.

Una vez más la combinación del ala-pívot Zach Randolph y el pívot español Marc Gasol fue la clave que permitió a los Grizzlies de Memphis venir de atrás y completar la mayor remontada de la temporada que los dejó con el triunfo de 101-98 ante los Celtics de Boston.

Randolph aportó un doble-doble de 25 puntos, 13 rebotes y dos tapones con los que encabezó una lista de cinco jugadores que tuvieron números de dos dígitos.

La inspiración encestadora de Randolph, que sigue de reserva como sexto jugador, junto con Gasol que hizo una gran labor en las acciones dentro de la zona, permitieron a los Grizzlies remontar una desventaja de 21 puntos que llegaron a tener en la segunda parte.

Gasol, que no brilló en el juego ofensivo, estuvo dominante bajo los aros y al final del partido también consiguió un doble-doble de 11 puntos y 11 rebotes.

El jugador de Sant Boi disputó 36 minutos en los que anotó 5 de 17 tiros de campo, y encestó el único lanzamiento que hizo desde la línea de personal.

Gasol fue decisivo en el juego defensivo de los Grizzlies, el que una vez más los salvó de perder el partido, al capturar nueve rebotes bajo la canasta del equipo de Memphis, además de dar una asistencia y perder dos balones.

El base estrella Damian Lillard logró 31 puntos y nueve asistencias que lo dejaron como el líder del ataque de los Trail Blazers de Portland que remontaron y derrotaron 115-110 a los Thunder de Oklahoma City.

El ala-pívot hispano-congoleño Serge Ibaka fue el cuarto máximo encestador de los Thunder al conseguir 14 puntos en los 35 minutos que estuvo en la pista del Moda Center, de Portland.

Ibaka encestó 5 de 7 tiros de campo, incluidos 4 de 4 triples --su mejor marca en lo que va de temporada--, logró también tres rebotes, que fueron defensivos, y puso dos tapones, que lo dejaron líder del equipo en esa faceta del juego.