Antonio Herrero, máximo responsable del Mar Alicante, ha declarado este martes que la renuncia de su club a jugar en la máxima categoría del balonmano femenino español obedece a que no tienen suficiente dinero para completar la temporada de División de Honor. El Adesal La Fuensanta de Córdoba, descendido tras acabar penúltimo clasificado en la pasada liga, ocupará la plaza de una entidad histórica dentro del panorama deportivo femenino.

"Las previsiones son aún peores que la temporada anterior. Hemos perdido cerca de 40.000 euros de patrocinio privado y no ha habido manera de lograr financiación. Antes que acumular déficit, preferimos renunciar, no queremos que la bola sea insalvable y acabe con la desaparición de club", manifiesta.

En la mañana de este martes se ha sorteado en Madrid el calendario liguero y el Mar Alicante no se encontraba entre los 14 integrantes. El club alicantino ha renunciado tanto a la máxima categoría como a la Segunda división. "Como hemos renunciado, nos pondrán multa económica y tenemos que bajar dos categorías, jugaremos en autonómica", ha añadido Herrero.

"Me parece moralmente inaceptable que, con la que está cayendo, tengamos que acudir a lo público para poder sobrevivir, de eso nada. Podíamos haber salido pero no hubiéramos podido terminar la temporada, nos hubiéramos quedado sin dinero a mitad de campaña", ha continuado.

El responsable del Mar Alicante ha asegurado que para estar dignamente en División de Honor hacen falta "como mínimo" unos 140.000 euros y no los tenemos. "Hemos logrado reducir la deuda de temporadas anteriores y ahora está en unos 86.000 euros a jugadoras, más proveedores. La pasada temporada vamos a terminarla con las jugadoras al día y quedará pendiente algún pago a proveedores. Lo sentimos pero no se ha podido hacer nada más", ha finalizado.