El entrenador del Barcelona, Luis Enrique Martínez, ha preferido mirar el "lado positivo" de la mala dinámica por la que pasa su equipo, que suma uno de los 12 últimos puntos posibles en la Liga, y ha admitido que celebrarán una gran fiesta si levantan el título.

"Me va el ritmo y la adversidad, lo tengo en los genes gijoneses; soy así de gilipollas. A mí me va el baile, tengo unas ganas enormes porque no me puedo imaginar el fiestón que nos vamos a pegar si ganamos la Liga", ha aseverado en la rueda de prensa previa al encuentro que mañana disputarán contra el Deportivo de La Coruña.

El preparador asturiano afronta con optimismo la visita a Riazor, donde espera que su equipo juegue como lo hizo contra el Valencia, si bien confía en que su jugadores estén más acertados de cara a portería.

"Me aferro a mis jugadores, a su actitud, a la manera de competir que tienen y a la fe que tengo de que puedan ganar todos los partidos que quedan. Hay que mejorar y conseguir que el rival te llegue menos", ha enfatizado.

En este sentido, ha querido enviar un mensaje positivo a su plantilla: "Me basaría en lo que estamos haciendo ahora. Hay que centrarse en lo positivo e intentar que los aspectos negativos generen menos secuelas y que el jugador las supere".

Ante las críticas surgidas por la manera de responder a un periodista tras la última derrota del Barcelona contra el Valencia, el preparador azulgrana se ha mostrado desafiante y no ha querido disculparse, más bien todo lo contrario.

"No tengo nada de qué disculparme. No he faltado el respeto a nadie. Muchos medios faltan al respeto a muchos de nosotros y a mí cada día. Si no les gusta mi estilo, me importa un bledo. Un bledo para decirlo de manera educada", ha espetado hoy el asturiano en la rueda de prensa previa al encuentro contra el Deportivo.

Así ha reaccionado Luis Enrique este martes cuando ha sido cuestionado por si quería disculparse por la reacción que tuvo a la pregunta del periodista del Diario Gol Víctor Malo.

En la penúltima comparecencia de prensa, Malo le preguntó por si la preparación física era una de las causas de la racha de cuatro derrotas en los últimos seis encuentros de su equipo.

"¿Cómo es tu apellido? Siguiente pregunta", respondió molesto Luis Enrique, que este martes, lejos de rectificar, ha evidenciado la falta de sintonía con los periodistas que siguen la actualidad del Barcelona.