La lucha por conseguir al base Chris Paul se ha convertido en el gran centro de atención de la NBA y más cuando los Lakers de Los Ángeles han entrado de lleno en la puja por conseguir sus servicios junto con los de Howard, lo que podría hacer que Pau Gasol se fuera a los Hornets.

El objetivo de los Lakers es emular a Miami Heat y conseguir un 'Big Three' con Kobe Bryant, Paul y el pívot Dwight Howard, que es otro de los jugadores que pretende el equipo angelino.

Aunque todos son rumores e informaciones sin confirmar, la realidad es que Paul ya se reunió el lunes con el gerente general de los Hornets, Dell Demps, y aunque el tono fue cordial y amigable, el jugador le dijo claramente al directivo que no piensa firmar un contrato de extensión antes que comience la reducida temporada.

La decisión de Paul significa que los Hornets podrán entrar en el "circo" de inestabilidad que vivieron los Nuggets de Denver con el alero Carmelo Anthony, cuando también se negó a firmar una extensión porque lo único que deseaba era el traspaso a los Knicks de Nueva York, que fue lo que consiguió.

Los Hornets, equipo que pertenece a la NBA y tiene que ser vendido, saben que Paul es su mejor jugador y valor, pero a la vez no quieren dar una imagen de inestabilidad de cara a los posibles compradores y están listos para optar por formar una plantilla que tenga un futuro estable y con talento. Aunque hay hasta siete equipos que están interesados en los servicios de Paul, incluidos los Rockets de Houston, Celtics de Boston, Mavericks de Dallas y Knicks de Nueva York, los Lakers han surgido como el destino más interesante para el base All-Star.

Si al final los Hornets y los Lakers llegan a un acuerdo y Paul está conforme, el gran perjudicado podría ser el ala-pívot español Pau Gasol, que podría ser la moneda de cambio que ofrecería el equipo angelino para asegurar el traspaso del base.

La jugada de los Lakers para fichar a Howard es, al parecer, ofrecer al pívot Andrew Bynum a Orlando Magic como parte del traspaso.

Se sabe que a Paul, aunque su primer objetivo es llegar a los Knicks para jugar con Anthony y el ala-pívot Amare Stoudemire, también le haría ilusión tener de compañero a Howard y poder firmar un contrato de larga duración con un equipo como los Lakers. Howard cada vez tiene más claro que no se va a quedar con Orlando, que su meta es llegar a los Lakers, y varias fuentes periodísticas confirmaron que ha mantenido reuniones personales con Paul para valorar las posibilidades que tienen de jugar juntos en otros equipos.

Las variantes son enormes y también se contempla la marcha del ala-pívot Lamar Odom en el posible traspaso con Orlando para conseguir a Howard y que los Lakers puedan recibir al alero turco Hedo Turkoglu.

Lo que tienen claro los Lakers es que la llegada de Paul al equipo solo se dará si existe la garantía de que el base esté ligado con un contrato de larga duración. En la misma tesitura están los Celtics, que podrían ofrecer al base Rajon Rondo en el traspaso aunque no se arriesgarán a quedarse sin su jugador titular, que tiene un contrato por cuatro temporadas, sin la garantía de que Paul les firme otro por los mismos años o más.

Si los Lakers logran conseguir a Howard y Paul, antes que de comienzo la nueva temporada el próximo día de Navidad, la filosofía defendida por el comisionado de la NBA, David Stern, de que el nuevo convenio colectivo iba a generar mayor igualdad y competitividad entre todos los equipos, quedaría en evidencia.