Y es que, a decir verdad, el Lorca mereció sentenciar antes, por brillantez y fe, pero los de Mané no se descompusieron y arañaron un empate que sabe a gloria.El conjunto murciano saltó al césped con una voracidad de gol que pronto intimidó al Levante, quien se empequeñeció y se limitó a contener las vigorosas embestidas locales. En una de ellas, y tras providenciales despejes de Alexis y Aizpurúa en dos ocasiones previas clarísimas, el Lorca cobró ventaja y el panorama se enturbió para los de Mané.
Mejoría con diez
El guión del partido, pese al jarro de agua fría del tanto, no varió un ápice, y el Levante pareció resignarse a su suerte mientras el 2-0 se dibujaba en el horizonte.
Entonces, recién inaugurada la segunda mitad, Descarga vio el camino de los vestuarios y, paradójicamente, el Levante vio la luz. El oxígeno que Mané había inyectado con la entrada de Ceballos, Nagore y N’Diaye rehabilitó al equipo, aturdió al Lorca y, sin grandes alardes, niveló el partido. El artífice, N’Diaye, con un bello remate que perforó la escuadra derecha de Jáuregui.
Comentarios
Hemos bloqueado los comentarios de este contenido. Sólo se mostrarán los mensajes moderados hasta ahora, pero no se podrán redactar nuevos comentarios.
Consulta los casos en los que 20minutos.es restringirá la posibilidad de dejar comentarios