Con los valores del su película favorita, 'Gladiator'.  Así consiguió Guillermo García-López ganar el torneo de Bangkok el pasado domingo, el segundo título de su carrera. Templanza, valor, lucha... los mismos valores que inculcó Guardiola a sus chicos para ganar la Champions.

Tras su victoria el Bangkok, la primera llamada que recibió fue la de Iniesta. Son amigos desde que con 13 años se conocieran en un colegio de Barcelona. Y es que Guillermo, Willy o Guille -como le llaman sus amigos- también tiene entre sus pasiones el fútbol. Con este lazo tan fuerte con el futbolista, sumado a la pasión por el mismo tipo de cine que Guardiola, no es de extrañar su forofismo por el F. C. Barcelona.

Seis años antes de ese encuentro con Iniesta, el pequeño Guille daba ya sus primeros raquetazos. Sus padres, Juan García Ballesteros y Paqui López Cuesta, lo iniciaron en este duro deporte con sólo 7 anitos. Desde entonces, la carrera de aquel chaval de La Roda (Albacete) fue en ascenso. Se destapó como uno de los mejores jugadores del circuito junior en España. Después llegaron sus primeros puntos en la ATP (en 1998). Ahora, tras su brillante victoria en Bangkok, asciende hasta el puesto 39 de la clasificación mundial del tenis, quedándose a uno de su mejor ránking.

Pero no todo es tenis en la vida de Guillermo. El esquí es otro de los deportes que le motivan, además de practicar fútbol. Gran seguidor taurino, admira profundamente a José Tomás. Pero no es al único, ya que entre los deportistas a los que sigue se encuentran eminencias del deporte como Zidane, Jordan o Sampras.

Para este albaceteño de 27 años, la semana que ha durado el torneo asiático ha sido la mejor de su vida. "Ha sido una semana increíble", dijo Guillermo. No en vano, en el camino a la final había dejado K.O. al letón Ernest Gulbis y al número uno del mundo, Rafael Nadal.

Y, aunque utilice libros como 'El código Da Vinci' para conciliar el sueño, Willy sabe que todo lo ocurrido es una realidad.