Rafa Nadal no ha tenido vacaciones y acumula 20 días de entrenamientos, desde que ganara la Davis a principios de diciembre, para preparar el año 2010. El objetivo más inmediato, la defensa de su título en Australia (18-31 de enero), el primer Grand Slam de la temporada. Su tío y entrenador, Toni Nadal, analiza para 20 minutos la temporada pasada y las posibilidades de su sobrino de volver a ser número 1 del tenis mundial.

¿Cómo acabó Rafa la temporada 2009?

Peor que otros años. No ha terminado jugando demasiado bien y eso le ha producido intranquilidad, pero con trabajo lo superará.

¿Los entrenadores también acaban cansados?

No. Nosotros no jugamos.

¿Tiene solución el problema del calendario?

¡Hombre, claro! Los tenistas, que son los que juegan, deberían ponerse de acuerdo en hacer algo.

¿Recuperará en 2010 el estado de forma de cuando fue n.º 1?

No lo sé. Vamos a intentarlo y creo que hay posibilidades de lograrlo, pero no será fácil. Cada vez salen más jugadores que le pegan más fuerte a la pelota.

¿Un campeón del deporte, nace o se hace?

Nace con unas muy buenas condiciones y, después, como decía Picasso, «cuando baje la inspiración, que me pille trabajando».

¿Cuánta responsabilidad tiene en el éxito de Rafa?

Poca. No mucha.

¿Le afecta su fama?

Para nada. Puedo andar por la calle tranquilamente.

¿Rafa se entrena más que ningún otro tenista?

Creo que no. Entrena como la mayoría, aunque sí es verdad que de pequeño ha entrenado bastante. Tiene buena base.

¿Se lesiona más que el resto?

No sé, pero es verdad que Rafael ha forzado más de la cuenta y que ha tenido un problema con las plantillas que lleva, que le han provocado varias lesiones.

¿Algún día tendrá un mal gesto dentro de la pista?

Yo creo que no. Por ejemplo, nunca romperá una raqueta. Es respetuoso, en la victoria y en la derrota.

¿Cuando le entrena, deja usted de ser su tío?

No. Siempre hay un pelín más de confianza y un pelín más de exigencia.

¿Le tiene que corregir mucho en los entrenamientos?

Él ya está a un nivel en el que sólo hay que corregirle pequeños detalles.

¿Sigue sin ver a Rafa entre los más grandes del tenis?

Está en un segundo escalón. Lleva seis Grand Slams, que para nosotros está muy bien. Si dentro de cinco años gana muchos más, le meteré en otra división.

¿Cómo llaman en casa a Rafa Nadal?

Rafael, faltaría más. Rafa es como la gente le conoce y Rafael es como le llama la gente que, realmente, le conocemos.

¿La familia es la más crítica con él?

Nosotros estamos muy satisfechos con lo que ha conseguido. Lo que nos motiva es seguir luchando para estar más tiempo arriba.

¿Ha superado ya Rafa el bache emocional por la separación de sus padres?

Para él, en la vida, es más importante la familia que el tenis. Está aprendiendo a convivir con eso, como cualquier persona que quiere a sus padres.