«El Astaná traicionó el año pasado la confianza de los organizadores», señaló el Tour en una nota. El director de la carrera, Christian Preudhomme, matizó que la medida no se toma contra el ciclista madrileño: «No es de ninguna forma una decisión contra el corredor, es un equipo quien se ha excluido. Si Contador fuera fichado por otro equipo podría competir».

Contador conoció la noticia en plena cuarta etapa de la Challenge de Mallorca. Entre la indignación y la impotencia, el de Pinto atacó en la ascensión a Sa Batalla, a 80 km de meta, neutralizó a los escapados y rodó enrabietado en cabeza de carrera, con dos minutos de margen, para ser cazado por el pelotón a seis km de meta. «Astaná en el Tour», gritó a la cámara de televisión. En el podio, como el más combativo del día, también señaló a su patrocinador. Después, sufrió para no llorar.

«Es injusto. El nuevo Astaná es un equipo diferente», se lamentó. La Vuelta espera.

Tres apuntes sobre...

Los orígenes del veto

1Malos antecedentes.

Astaná llegó al ciclismo en el año 2006 por mediación de Vinokourov para sostener la estructura de Manolo Saiz, al que la operación Puerto contra el dopaje dejó sin sus patrocinadores. Se relacionó a Contador con la trama, pero él lo desmintió. El Tour vetó a varios ciclistas y el Astaná no pudo correr el Tour. En 2007, ya sin relación con Manolo Saiz, varios ciclistas –Kessler, Mazzoleni, Kashechkin, Vinokourov– dieron positivo o tuvieron relación con el dopaje. Vinokourov, durante el Tour.

2Un equipo nuevo.

En noviembre, Alberto Contador firmó dos años con el nuevo Astaná, que en su tercera temporada volvía a presentar un proyecto distinto aprovechando los mimbres del desaparecido Discovery Channel, con el que Contador ganó el Tour. La organización, que este año rompió con el ProTour, no les aseguraba una plaza.

3¿Y ahora?

El Tour dice que Contador puede participar... pero con otro equipo. ¿Dejará Astaná? ¿Habrá recurso ante el Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS)? El Tour no ha confirmado los equipos de este año, sólo su veto al Astaná. El de Pinto ya habló ayer de retocar su calendario, pensando en la Vuelta.