Mediados de septiembre, apenas tres jornadas de Liga, sin que haya dado comienzo la Champions y menos de cuatro meses después de haberse proclamado campeón de Europa, y el Real Madrid ya está en crisis. Así es este club en el que todo lo que pasa se magnifica y se lleva hasta el extremo. No existe el gris en Chamartín, solo el blanco y el negro.

Haber perdido la Supercopa de España ante el Atlético y dos derrotas consecutivas en Liga ante la Real Sociedad y ante los rojiblancos han convertido el club en un polvorín y el estreno en la Liga de Campeones en un partido de gran importancia.

El Basilea debería ser un rival no demasiado complicado, pero este Real Madrid está ofreciendo demasiadas lagunas en su juego y los suizos conviene recordar que ya vencieron al Chelsea la temporada tanto en Stamford Bridge como en terreno helvético. Y hace tres años eliminaron al United en la fase de grupos.

¿Pero qué le pasa a este Real Madrid? ¿Por qué ha pasado de reinar en Europa a este desastroso momento deportivo?:

- Un centro del campo roto. Comparando el equipo con el del año pasado, el único cambio de cromos lo encontramos en el centro del campo. Y precisamente por ahí es por donde se rompe el Real Madrid. Sin Xabi Alonso, el Madrid ha perdido equilibrio e inteligencia táctica, mientras que Di María era el factor desequilibrante que sorprendía desde atrás, el hombre imprevisible que aportaba desborde en esas arrancadas locas que tanto daban al conjunto blanco. El argentino, además, aportaba un trabajo atrás sobresaliente, un esfuerzo continuo de un jugador con una resistencia física sobresaliente.

Kroos ha tenido que retrasar su posición natural y aún no ha ofrecido todo lo que tiene, está en proceso de adaptación a un nuevo club y un nuevo puesto. A James la calidad nadie se la puede negar, pero aún no es el jugador que deslumbró en el Mundial y, además, su aportación al juego defensivo es casi nulo.

- Una defensa desordenada. Ver a los 4 defensas en línea es casi una utopía. Cada uno hace la guerra por su cuenta, lo que desordena la zaga y da facilidades al rival. Además, a nivel individual ninguno está en su mejor momento de forma. La lesión de Carvajal, el que mejor rendimiento estaba ofreciendo, ha sido un grave percance.

- Casillas no para una. Dejando a un lado si podía haber hecho más en alguno de los goles encajados por el Real Madrid, lo cierto es que el portero está siendo totalmente intrascendente. A sus habituales problemas en el juego aéreo ha sumado ahora un dato preocupante: ha encajado 6 goles en los últimos 7 disparos a puerta. El público del Bernabéu le pitó en el derbi ante el Atlético y cada son más los que reclaman una oportunidad para Keylor Navas.

- Un delantero sin gol. Karim Benzema solo ha marcado un gol -ante el Córdoba- en este inicio de temporada (seis partidos). El  francés no es un atacante 'cazagoles' y aporta otras cosas al juego del equipo, pero a un delantero centro hay que exigirle que marque.

- Las miradas ya se dirigen al palco. La manera en que Florentino Pérez ha gestionado al equipo campeón de Europa no ha gustado a los aficionados. Intransigencia en la negociación con Di María que acabó en la salida del argentino y dejar escapar a Xabi Alonso a poco de finalizar el mercado de fichajes ha debilitado al equipo. Los fichajes, especialmente James por el desembolsó que hubo que realizar, no convencen.

- Ancelotti, sin soluciones. Tras el desastre de San Sebastián, el italiano prometió cambios. Pero lo cierto es que ante el Atlético no varió nada del equipo y se echa en falta que el entrenador tome decisiones para variar el rumbo errático del equipo. Sus alineaciones están siendo demasiado políticamente correctas, ni una estrella ni un gran fichaje pasan por el banquillo.