La mayor parte de las veces son los jugadores o el público los que tienen comportamientos poco adecuados en los partidos de fútbol, pero de vez en cuando sale algún árbitro que da la nota.

El pasado sábado, el árbitro suizo Massimo Busacca, en el encuentro de la Copa Suiza entre el Baden y el Young Boys, mostró el dedo corazón al público, una actuación poco correcta que le costó la sanción de 3 partidos sin pitar.

Pero ahí no termina todo. En los países árabes están indignados con la educación de Busacca quien, aprovechando el lanzamiento de un corner en el encuentro entre el Al-Gharrafa y el Al-Khor (el pasado 12 de septiembre en Qatar), se puso a orinar en el campo (como se puede ver en el vídeo que abre la noticia, censurado por una tele árabe "por vergüenza").

Según el diario brasileño O Globo, la Federación pensó en multarle, pero Busacca pidió disculpas tras el encuentro diciendo que estaba indispuesto. ¿Cuál será la próxima?