Segunda derrota consecutiva de un Etosa venido a menos en las últimas jornadas que está lejos de ser el conjunto que maravilló la pasada temporada. Ayer, ante el Barcelona, el equipo de Trifón Poch apenas aguantó el tipo cinco minutos, el tiempo que tardó el Barcelona en calentar y, guiados por Juan Carlos Navarro, meter la directa para establecer las diferencias en el luminoso del Centro de Tecnificación.
Al termino del primer cuarto Etosa caía de once puntos y ésta era una losa demasiado pesada para los locales, que se mostraron poco acertados tanto en la parcela ofensiva como en la defensiva. Etosa estuvo siempre a remolque en el marcador y solo Oriol Junyent mantuvo el tipo en ataque y ayudó a albegar alguna esperanza de recuperación.
El juego exterior, como anunciaban las estadísticas, fue determinante y Etosa demostró que es una de sus carencias. Al concluir el primer tiempo el Barcelona habían transformado seis de siete intentos frente al uno de nueve de Etosa.
Con la recta final del partido el Barcelona no se relajó y estableció la diferencia definitiva de 26 puntos, una nueva sólida ventaja en contra del Etosa Alicante.
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