Ben Affleck y 'Live by Night' se apuntan a la carrera hacia los Oscar

Lo de Ben Affleck y el Oscar a Mejor Director se va configurando cada vez más como lo de Leonardo DiCaprio y esa estatuilla a Mejor Actor Principal que tanto se le resistió hasta El renacido. Sólo que, en el caso del bro de Matt Damon, la cosa tiene matices de auténtico recochineo: Affleck cuenta ya con dos Premios de la Academia (por El indomable Will Hunting, como guionista, y otro a la Mejor Película por Argo, que recogió en calidad de productor), pero jamás ha sido nominado a la categoría reina de los cineastas. Hasta ahora, al menos, porque Live by Night, su nuevo filme, ha cambiado su fecha de estreno a fin de situarse en la carrera por las estatuillas.

En lugar de en otoño de 2016, como estaba planeado, Warner lanzará la cinta a gran escala en EE UU el 13 de enero (tras un primer estreno limitado el 25 de diciembre), lo cual sitúa a Live by Night en plena temporada de premios. Recordemos que Focus Features realizó una jugada similar con el calendario para así poner a J. A. Bayona y Un monstruo viene a verme en el punto de mira de los académicos, dado que el plazo para las primeras votaciones comenzará el 5 de enero. Recordemos que la película adapta una novela de Denis Lehane (Mystic River, Adiós pequeña adiós) sobre el hijo de un policía de Boston que se convierte en gangster durante la Prohibición.

Mientras esperamos el anuncio oficial de los nominados (el 24 de enero), podemos preguntarnos cuáles serán los hipotéticos rivales de Affleck por el Oscar. Según Collider, la candidatura de Clint Eastwood por Sully (como director y, posiblemente, también como película) se da por hecha. Y, barriendo para casa, podemos augurar que Bayona también competirá por las categorías mayores. Por lo demás, Damien Chazelle tendrá un hueco casi seguro por La La Land, mientras que Martin Scorsese podría llevarse también una candidatura por Silence, en el caso de que la consiga terminar a tiempo. Sólo podemos estar seguros de que a Affleck le sobran las ganas de subir al estrado y soltarle un "argoderse" como una casa a todos estos posibles rivales.